Y como si los sueños y los deseos fueran escribiendo los días, hoy me encuentro viviendo todos mis sueños y deseos de golpe.
Esta vez en una mirada hermosa y profunda, buena y desinteresada. Con mayor curiosidad que malicia, con más espiritualidad de la que ella a penas hace conciencia.
Igual que lindo poder sentir tanto en tan poco tiempo, que duro es acostumbrar a las emociones a la constante impermanencia de las cosas.
He aprendido a amar profundamente, y luego a dejar ir, ahora sin lamentos, sin remordimientos, pero sobre todo sin dolor. Porque en esos hilos dorados de intensa luz que se cruzaron entre sus almas y la mia; en medio de esta comunicación no verbal que se comparten a veces las almas, es que entiendo sobre el valor de las personas, del valor del cariño y lo curativo de la confianza en el otro.
Han sido 6 meses, han sido 6 personas especiales, conexiones todas inolvidables, transformaciones culturales y demostraciones de cariño. Han sido caminos que se cruzan y que volverán a encontrarse. Por el momento sólo queda recordar que, todo tiene una sincronía perfecta, que los deseos se materializan y que la esencia genuina de las cosas acerca o separa todas las cosas. Por lo demás sólo queda vivir.